top of page

Convivir con el covid.

  • Foto del escritor: Alina Arellano
    Alina Arellano
  • 11 abr 2020
  • 2 Min. de lectura

ree

Cuando comenzó el aislamiento, me preparé mentalmente para asumir todo lo que se venía, o al menos lo que mi mente podía dimensionar que se venía, me puse a consumir mil videos, los mejores ejercicios en casa, las recetas saludables, los podcast de productividad, las noticias minuto a minuto, hay que saber si el mundo se acaba, en fin, que las primeras semanas fueron a tope de power, pero este ritmo no fue nada sostenible.

A las dos semanas apareció un cansancio general, no tenía energía para hacer ejercicio, trabajar o ver noticias, solo me apetecía preparar comida y hornear cosas ricas, eso también me duró una semana, después fueron días extraños con diferentes emociones.

Entonces me di cuenta que había que hacer un DETOX, esa palabra nunca me ha gustado y menos cuando es respecto a tu metabolismo u órganos, pero en estos días tiene más sentido, comencé a dejar de seguir cuentas de ejercicio, repostería y de noticias y me quedé con los que de verdad me gustan o me aportan algo.

Tras aplicar esto a mis redes sociales, seguí por aplicarlo en mi cuerpo, me propuse solo consumir aquello que me nutre, cosa que parece difícil, si estás experimentando conductas alimentarias, que te tienen comiendo todo el día o por el contrario sin hambre todo el día.

Resulta básico entender que en una época tan incierta, aparecerán inseguridades y duelos que nos llevan a tener una necesidad de respuestas, a esto se le llama hambre de seguridad.

Cuando aparece este tipo de hambre y comes de más, puede ser por diferentes motivos, que tendrás que analizar y ser realista contigo, para mejorar poco a poco esta conducta tan común en todas y todos.

El motivos más común y más notorio es tener en casa ultraprocesados, estos productos están diseñados para producir placer palatable y estimular químicamente reacciones adictivas, por eso, no puedes comer solo una, haz un detox a tu despensa y rellena con comida real que de preferencia tengas que cocinar desde cero, esto te dará tiempo a saber si es comida real o ansiedad.

Otro motivo menos notorio, es que no sabes gestionar tus emociones, cuando aparece el aburrimiento, estrés, angustia, tristeza, etc, en lugar de sentirlo y aceptarlo, buscas evadir mediante algo placentero como la comida, para evitar esto el proceso es más complejo, pero tiene que ver con meditar, dejar aquellos factores que te estresan como la sobre información, hacer yoga, cambiar posturas, beber agua, pero analizar que si esta conducta es cosa seria, es mejor buscar ayuda nutricional y psicológica, llegar a la raíz del problema mediante herramientas profesionales, te ayudarán a tolerar la frustración y conocer otros sentimientos típicos de estos días.

Sea cual sea el motivo, es buen momento para realizar el famoso DETOX, pero no olvides mejorar sin juzgar, si tu proceso es lento, lo importante es que sea constante, no tienes que hacer ejercicio diario, no tienes que comer de revista, no tienes que ser más productiva, pero si tienes que conectar contigo y hacerte cargo de ti y de tus emociones.


 
 
 

Kommentarer


© 2023

bottom of page